lunes, 21 de noviembre de 2011

CABALLEROS LAS PREFIEREN RUBIAS, LOS (“Gentlemen Prefer Blondes”, EE.UU., 1953)


FICHA TÉCNICA  y SINOPSIS:
DIRECCIÓN: Howard Hawks. INTÉRPRETES PRINCIALES: Marilyn Monroe, Jane Rusell, Charles Coburn, Tommy Noonan. CANCIONES: Jule Styne y varios. COREOGRAFÍA: Jack Cole.
Lorelei y Dorothy son dos cantantes que hacen un crucero desde los Estados Unidos a París. Una rubia y otra morena, con su belleza y encanto seducirán a todo el pasaje. Las dos tienen el mismo objetivo: casarse con un millonario. Pero hay un inconveniente: Lorelei tiene un novio, cuyo padre contrató un detective para que la siguiera.

BREVE COMENTARIO:
Hay títulos de la historia del arte (en cualquiera de sus ramas) que, en sí mismos, se convierten en frases de referencia en conversaciones cotidianas (“Lo que el viento se llevó”, “Cien años de soledad”, “Cantando bajo la lluvia”, “Sonrisas y lágrimas”, “Con faldas y a lo loco”, etc.). Nos encontramos hoy ante uno de esos casos en los que el autor (en este caso, autora, como veremos) acierta plenamente al dar nombre a su obra. Nos estamos refiriendo a la escritora y guionista estadounidense Anita Loos, y a su novela corta de 1925 “Los caballeros las prefieren rubias”.
Fue tal el éxito de esta simpática (y muy recomendable) novelita, que terminó siendo convertida en un musical en 1949 con libreto de la propia Loos y música de Jules Stine, y sería llevada a la gran pantalla cuatro años más tarde por Howard Hawks, consiguiendo con ella una estupenda película al combinar con precisión de relojero un guión con unos maravillosos diálogos agudos y mordaces (obra de Charles Lederer, a partir del original de Anita Loos), un avasallador espíritu alegre y sensual a lo largo de todo su metraje, una dirección cinematográfica perfecta (como no podía ser menos, tratándose del director de obras maestras como “La fiera de mi niña”, “Río Bravo”, etc.), y el acierto de contar como protagonistas con dos maravillosas actrices, acertadísimas en sus respectivos personajes: la a todas luces impresionante presencia escénica de Jane Russell y el incomparable icono mítico de Marilyn Monroe.
Pedir más en una película sería pecar de avaricioso.

CARTELES Y PROGRAMAS DE MANO DE LA PELÍCULA




TRÁILER DEL FILM



PRINCIPALES NÚMEROS MUSICALES

“Diamonds Are Girl’s Best Friend”. Y si hablábamos de icono al referirnos a Marilyn Monroe, este tema se convierte en referencia clave de nuestra memoria visual y sentimental, y su letra sintetiza a la perfección los cambios en la consideración de la idiosincrasia femenina, aventurando aspectos de independencia feminista que, en otros niveles, aún tardarían algunos años en ser asimilados de forma más intensa. La idea de que “un beso en la mano puede ser muy romántico, pero no ayuda a pagar la cuenta del supermercado” puede ayudar a comprender lo dicho.




También a Jane Russell le gustan los diamantes. ¿Pourquoi pas? Pero no sé si en una sala de justicia los encontrará…



“A Little Girl From Little Rock”. Aparte de los ya universalmente reconocidos hallazgos del film (y que siguen comprobándose en este estupendo número), no podemos desaprovechar la ocasión para destacar el vestuario diseñado por William Travilla y Charles Lemaire, sensuales y voluptuosos, acoplados perfectamente a las personalidades de las dos intérpretes protagonistas.



“Ain’t There Anyone Here for Love”. Jane Rusell, en un número que hará las delicias de todo filogay que se precie, luce espectacular rodeada por las carnes prietas de un grupo de atletas del equipo olímpico americano, con los que viaja en el mismo barco.



“Bye Bye Baby”. Seguro que cualquiera pondría la misma expresión que Tommy Noonan si se encontrara ante una pícara de semblante angelical como Marilyn en esta escena.



BONUS DE REGALO (Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid)

En los últimos años, casi todas las cantantes que han querido brillar en el mundo del espectáculo añadiendo a las capacidades canoras sus esplendores fisicos, se han visto obligadas, de una forma u otra, a emular las dotes escénicas y sensuales que luce Marilyn Monroe en el número de los diamantes. Hoy en el Pisuerga daremos un repasillo a las más famosas, empezando, como no podía ser menos, por Madonna, continuando por Beyonce y Kylie Minogue, y finalizando con un número perteneciente a la película “Burlesque” que vimos hace pocas entradas (con la presencia de Cristina Aguilera)

Madonna (“Material Girl”, distinta canción pero homenaje evidente)




Kylie Minogue (en vivo)



Beyonce (anuncio Emporio Armani)



Cristina Aguilera y “Burlesque”




Y, como en los discos dedicados de las radios en los años 60, a petición de Ángel de Quinta aquí van, no una, sino dos interpretaciones de los famosos "diamonds" a cargo de Carol Channing, que estrenara la obra en Broadway en 1949. La primera pertenece a un show de TV en 1953, y la segunda es de 1989.




5 comentarios:

  1. Este sí que es un icono de verdad del cine musical. Aunque la historia no es que sea muy allá, las canciones y los números de baile son fantásticos. Me encanta el de los gimnastas del barco!!
    Y sobre todo ellas: Jane y Marilyn, Marilyn y Jane, una morena y una rubia... Una energía y una gracia que no se da con mucha frecuencia.
    Desde luego me habría encantado ver Carol Channing en este papel, el que la lanzó a la fama en el teatro (eso se le ha escapado al Pisuerga, jejeje), frívola, loca y divertidísima como siempre.

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  2. La verdad es que a pesar de la testosterona que despliega su director en los western que dirigía, e interpretaba el machito de J. Wayne, esta película tiene mucha pluma, no hay nada más gay que Marilyn. Y Ángel el número de los gimnastas es de los del día del orgullo. Por lo demás qué duda cabe que es una gran película

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  3. Sr. Ángel, como podrá comprobar si vuelve a surcar el Pisuerga, sus deseos son órdenes. ISMAEL

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  4. Solo decir que este blog y el de literatura son excelentes!!

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  5. Bien por ti, y por Carol!! ¿No es fantástica por dios? Nunca nadie se rió tanto de sí misma, y con tantísimo arte!!
    Que aprendan las bobas del burlesque!

    Es verdad Txema, cómo son ellos de fuertes, en todos los sentidos!

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